Descripción
Es una enfermedad infecciosa causada por una bacteria llamada "Mycobacterium Tuberculosis". Se puede prevenir y curar, si se trata de manera oportuna.
Se propaga a través del aire cuando las personas con tuberculosis tosen, estornudan o escupen. Las formas graves de tuberculosis se pueden prevenir con la vacuna "Bacillus Calmette-Guerin (BCG)".
Si conoces a alguien con tos de más de dos semanas, puede tener tuberculosis. Es necesario que acuda a su Unidad Médica para realizarse la detección y recibir tratamiento en caso necesario.
Síntomas
- Tos, a veces acompañada de flema o sangre
- Fiebre
- Pérdida de peso
- Fatiga
- Sudoración excesiva, especialmente por la noche
Diagnóstico
La detección se realiza a través de baciloscopia, que es un estudio de la expectoración o flema, también puede ser por medio de prueba molecular. El diagnóstico se complementa con el interrogatorio, la exploración física y demás estudios.
Las personas que conviven con una persona enferma de tuberculosis pulmonar deben someterse a un Estudio de Contactos en su unidad médica, para descartar que se hayan contagiado.
Tratamiento
Las personas con tuberculosis se tratan con antibióticos, deben tomarse por mínimo 6 meses. Es peligroso suspender el tratamiento antes de tiempo o sin revisión médica, ya que estas bacterias presentes en el organismo podrían adquirir resistencias farmacológicas.
Grupos vulnerables
- Niñas y niños
- Personas mayores
- Personas indígenas
- Personas con defensas bajas
- Personas con malnutrición (bajo peso u obesidad)
- Personas que viven con VIH
- Usuarios de tabaco, drogas y alcohol en exceso
- Personas enfermas con diabetes
- Personas que trabajan como jornaleros, en albergues, asilos, fábricas
- Personas privadas de su libertad