Las mujeres son más vulnerables a padecer enfermedades crónicas degenerativas y cánceres, consideradas un problema de salud pública, por ello, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) realiza acciones académicas, asistenciales y preventivas, como la detección temprana y tratamiento oportuno de éstas, en sus clínicas y hospitales.
El desarrollo de diabetes mellitus, hipertensión y cáncer de mama está asociado a un índice de masa corporal elevado, por ello es necesario prevenir la obesidad, cambiar los estilos de vida con una alimentación balanceada que incluya abundantes vegetales, disminuir las grasas saturadas y los carbohidratos, además, hacer ejercicio físico.
En el caso de cáncer cérvico uterino, las medidas preventivas se basan en dar mayor información a mujeres y varones para que utilicen métodos de protección durante la relación sexual, que disminuyan el contagio del virus del papiloma humano así como la realización de la prueba de Papanicolaou a partir del inicio de la vida sexual.
La ginecóloga oncóloga del Hospital de Gineco-Obstetricia número 3 del Centro Médico Nacional La Raza, Patricia Alanís López, afirmó que estos padecimientos tienen mayor repercusión en las mujeres, principalmente por el estilo de vida actual.
Por ello recomendó a las pacientes acudir a los consultorios de PrevenIMSS, para ser revisadas por la enfermera o el médico, se otorgue la solicitud de mastografía, y en aquellas pacientes con sospecha clínica (por mastografía o ultrasonido) se envíen a los servicios de Oncología en hospitales de segundo y tercer nivel.